El arte y la sensibilización social: presentan performance sobre voto ilegal en la Universidad Iberoamericana
El pasado miércoles 14 de septiembre, tuvo lugar en la Universidad Iberoamericana el performance binacional “USA Estación laboratorio artístico / político para las elecciones estadounidenses 2016”,
cuyo objetivo fue sensibilizar y visibilizar el opaco escenario de
política internacional que permea por las elecciones estadounidenses del
próximo ocho de noviembre, dirigido principalmente para quienes
legalmente no pueden participar de los comicios en dicho país.
Los estudiantes y catedráticos de la institución educativa emitieron sus votos de manera poco común, a través de plantillas del juego de lotería en la que los participantes imprimieron su voto con tinta roja a manera de sangre. Además, se utilizaron las cabezas de la candidata demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump (en bases de unicel) para colocarles etiquetas con diversas frases en representación de sus ideologías políticas, como exclusión, migración, igualdad, tolerancia, racismo y discriminación.
En la instalación performática participaron 300 votantes y asistieron alrededor de mil personas. Hillary Clintón resultó ganadora de las elecciones con el 64.45 por ciento de votos registrados, mientras que Donald Trump obtuvo sólo el 2.42 por ciento de sufragios. El resto se repartió entre los demás contendientes de la campaña electoral estadounidense (Jill Stein, Gary Johnson y Bernie Sanders).
El proyecto The official unofficial voting station voting for all who legally can´t vote, se llevó a cabo bajo la idea original y dirección de la Aram Han Sifuentes, reconocida maestra, curadora y artista coreana; junto con Roberto Sifuentes, uno de los mejores maestros de Performance en la School of the Art Institute of Chicago. También contó con el apoyo y la colaboración del Jane Addams Hull-House Museum, a través de su curador oficial Ross Staton Jordan. Han Sifuentes no puede votar en su lugar de residencia, Illinois, Estados Unidos.
En México, el performance ¡¡Tu voto ilegalmente también cuenta!!, se realizó bajo la dirección de Cecilia Aguilar Castillo, académica de la Maestría en Comunicación y de Erick Fernández Saldaña, coordinador de la Licenciatura en Relaciones Internacionales de la Universidad Iberoamericana.
“Tengo una tarea en esta corta y ‘normal’ existencia: sentir y pensar lo más que pueda, aunque a veces duela; así he encontrado en el proceso de lo doloroso, lo impensable y lo ‘imposible’, cura en el performance. Yo no soy nadie para cambiar al mundo, pero me basta sólo una acción para encontrar apoyo en aquellos tan ajenos, con los que ‘juego"’ y validan mi existir. Frente a tan complejas problemáticas lo lúdico es internacional, nacional y personal; el juego siempre está al azar, al participar, a lo mejor algo se puede modificar ( aunque sea en lo individual)”, señaló Aguilar Castillo en entrevista.
¿Qué significó para ustedes el performance?, se le pregunta a Fernández Saldaña.
“La dinámica propia de un performance frente a un hecho social incontrovertible como es un proceso electoral y con las particularidades que tendrá este noviembre en los Estados Unidos, donde se debate no sólo el futuro de aquel país sino la imagen que tenemos nosotros allá, y si las precisiones de uno de los posibles ganadores apunta simplemente a denostar, a cerrar, a no reconocer al otro, es importantísimo al menos dejar constancia en un plano de transgresión lo que significa para nosotros en este país enfrentar un proceso electoral como el norteamericano”.
¿Cuál es la lectura semiótica de los objetos que fueron utilizados?
El utilizar tornillos, que en nuestro humor popular y cotidiano es muy importante porque perder un tornillo o que se nos zafe un tornillo finalmente es perder la dimensión de la realidad y tratar de integrarlo a las cabezas que representaron a los candidatos fue tratarlo de volver una realidad. El tema de las banderas fue para hacerlos sentir que la presencia de nuestro país tiene que estar en sus cabezas, pensar también en el otro, en el vecino (…) las decisiones de un país se reflejan en el otro”.
“El punto central fue la sensibilización, en estos momentos las decisiones que se toman en un espacio fuera del nuestro nos afectan de forma directa y tenemos que estar sensibles, no sólo a lo que acontece en el día a día en nuestros límites geográficos, sino en lo que acontece más allá de nuestras fronteras particularmente cuando hay un discurso de odio y xenofóbico. Vemos con preocupación cómo se va a resolver este proceso electoral en Estados Unidos”.
Se contó además con la colaboración de los departamentos de Estudios Internacionales y de Ciencias Sociales y Políticas, así como de señaló Helena Varela, Directora de la División de Estudios Sociales de la Universidad Iberoamericana, quien señaló:
“El impacto fundamental, es llamar la atención de las personas para reflexionar sobre la realidad que vivimos, específicamente en el tema de las elecciones en Estados Unidos. No es ya verlo a través del clásico formato de una mesa redonda en donde el experto habla sobre los riesgos de que gane Trump o Clinton, sino que de una forma más lúdica y activa, el estudiante y el académico haga una pequeña reflexión de porqué esta elección nos afecta como mexicanos y la diferencia entre los candidatos. Es divertido, porque cada acto del performance tuvo un sentido (…) no sólo es el juego, sino que si lo haces de forma pensante le das un significado”.
María Guadalupe Morales Luna, secretaria de la Dirección del Departamento de Diseño, encargada de la parte interna operativa y la gestión de permisos; consideró que el performance “fue muy interesante, yo pensé que la gente iba a ser un poco más apáticos (…) la respuesta, sobre todo en los cortes de clase fue bastante buena, además de la participación del personal académico, me llamó mucho la atención ver a muchos directores de carreras y catedráticos. Lo importante es sensibilizar, para que se interesen realmente en los temas, porque todo mundo habla, opina y se queja, pero ahí paran las cosas, somos activistas de teclado, pero hacer algo ya en forma para concientizar cuesta mucho trabajo”.
El performance contó con la participación de Sara Barragán del Rey, Mariana Suárez Esquivel, Roxana Cañedo Vela, Mariana Molina Arriaga, Mónica López Cebón y Nayeli Díaz Arriaga, estudiantes de la Maestría en Comunicación.
Los estudiantes y catedráticos de la institución educativa emitieron sus votos de manera poco común, a través de plantillas del juego de lotería en la que los participantes imprimieron su voto con tinta roja a manera de sangre. Además, se utilizaron las cabezas de la candidata demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump (en bases de unicel) para colocarles etiquetas con diversas frases en representación de sus ideologías políticas, como exclusión, migración, igualdad, tolerancia, racismo y discriminación.
En la instalación performática participaron 300 votantes y asistieron alrededor de mil personas. Hillary Clintón resultó ganadora de las elecciones con el 64.45 por ciento de votos registrados, mientras que Donald Trump obtuvo sólo el 2.42 por ciento de sufragios. El resto se repartió entre los demás contendientes de la campaña electoral estadounidense (Jill Stein, Gary Johnson y Bernie Sanders).
El proyecto The official unofficial voting station voting for all who legally can´t vote, se llevó a cabo bajo la idea original y dirección de la Aram Han Sifuentes, reconocida maestra, curadora y artista coreana; junto con Roberto Sifuentes, uno de los mejores maestros de Performance en la School of the Art Institute of Chicago. También contó con el apoyo y la colaboración del Jane Addams Hull-House Museum, a través de su curador oficial Ross Staton Jordan. Han Sifuentes no puede votar en su lugar de residencia, Illinois, Estados Unidos.
En México, el performance ¡¡Tu voto ilegalmente también cuenta!!, se realizó bajo la dirección de Cecilia Aguilar Castillo, académica de la Maestría en Comunicación y de Erick Fernández Saldaña, coordinador de la Licenciatura en Relaciones Internacionales de la Universidad Iberoamericana.
“Tengo una tarea en esta corta y ‘normal’ existencia: sentir y pensar lo más que pueda, aunque a veces duela; así he encontrado en el proceso de lo doloroso, lo impensable y lo ‘imposible’, cura en el performance. Yo no soy nadie para cambiar al mundo, pero me basta sólo una acción para encontrar apoyo en aquellos tan ajenos, con los que ‘juego"’ y validan mi existir. Frente a tan complejas problemáticas lo lúdico es internacional, nacional y personal; el juego siempre está al azar, al participar, a lo mejor algo se puede modificar ( aunque sea en lo individual)”, señaló Aguilar Castillo en entrevista.
¿Qué significó para ustedes el performance?, se le pregunta a Fernández Saldaña.
“La dinámica propia de un performance frente a un hecho social incontrovertible como es un proceso electoral y con las particularidades que tendrá este noviembre en los Estados Unidos, donde se debate no sólo el futuro de aquel país sino la imagen que tenemos nosotros allá, y si las precisiones de uno de los posibles ganadores apunta simplemente a denostar, a cerrar, a no reconocer al otro, es importantísimo al menos dejar constancia en un plano de transgresión lo que significa para nosotros en este país enfrentar un proceso electoral como el norteamericano”.
¿Cuál es la lectura semiótica de los objetos que fueron utilizados?
El utilizar tornillos, que en nuestro humor popular y cotidiano es muy importante porque perder un tornillo o que se nos zafe un tornillo finalmente es perder la dimensión de la realidad y tratar de integrarlo a las cabezas que representaron a los candidatos fue tratarlo de volver una realidad. El tema de las banderas fue para hacerlos sentir que la presencia de nuestro país tiene que estar en sus cabezas, pensar también en el otro, en el vecino (…) las decisiones de un país se reflejan en el otro”.
“El punto central fue la sensibilización, en estos momentos las decisiones que se toman en un espacio fuera del nuestro nos afectan de forma directa y tenemos que estar sensibles, no sólo a lo que acontece en el día a día en nuestros límites geográficos, sino en lo que acontece más allá de nuestras fronteras particularmente cuando hay un discurso de odio y xenofóbico. Vemos con preocupación cómo se va a resolver este proceso electoral en Estados Unidos”.
Se contó además con la colaboración de los departamentos de Estudios Internacionales y de Ciencias Sociales y Políticas, así como de señaló Helena Varela, Directora de la División de Estudios Sociales de la Universidad Iberoamericana, quien señaló:
“El impacto fundamental, es llamar la atención de las personas para reflexionar sobre la realidad que vivimos, específicamente en el tema de las elecciones en Estados Unidos. No es ya verlo a través del clásico formato de una mesa redonda en donde el experto habla sobre los riesgos de que gane Trump o Clinton, sino que de una forma más lúdica y activa, el estudiante y el académico haga una pequeña reflexión de porqué esta elección nos afecta como mexicanos y la diferencia entre los candidatos. Es divertido, porque cada acto del performance tuvo un sentido (…) no sólo es el juego, sino que si lo haces de forma pensante le das un significado”.
María Guadalupe Morales Luna, secretaria de la Dirección del Departamento de Diseño, encargada de la parte interna operativa y la gestión de permisos; consideró que el performance “fue muy interesante, yo pensé que la gente iba a ser un poco más apáticos (…) la respuesta, sobre todo en los cortes de clase fue bastante buena, además de la participación del personal académico, me llamó mucho la atención ver a muchos directores de carreras y catedráticos. Lo importante es sensibilizar, para que se interesen realmente en los temas, porque todo mundo habla, opina y se queja, pero ahí paran las cosas, somos activistas de teclado, pero hacer algo ya en forma para concientizar cuesta mucho trabajo”.
El performance contó con la participación de Sara Barragán del Rey, Mariana Suárez Esquivel, Roxana Cañedo Vela, Mariana Molina Arriaga, Mónica López Cebón y Nayeli Díaz Arriaga, estudiantes de la Maestría en Comunicación.
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